Por: el chilangosapiens
La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece que todo ciudadano mexicano tiene derecho a votar y a ser votado, suena bonito, pero en los hechos este estatuto como muchos otros más ¡es letra muerta!. Resulta una burla que en las boletas electorales se agregue un espacio en blanco donde me den la opción de anotar al candidato o partido político que no aparezca en dicha boleta, pues si decido eligir dicha opción, el voto emitido será anulado. Somos tratados como menores de edad, estamos obligados a elegir las opciones que este sistema nos da nos gusten o no, no hay mas sopa que la que nos sirve nuestra "ciudadanizada" autoridad electoral. Ríos de dinero corren para montar el circense espectáculo que encumbra y acomoda a los de siempre que aunque pretenden distinguirse los unos de los otros con banderas de distintos colores, en los hechos se unifican como una misma manada que persigue el mismo objetivo, la misma causa que no es la misma de las mayorías, una vez montados en sus puestos "de elección popular" sacan la cuchara grande para pagar favores, despacharse a sí mismos y a sus allegados, y todos los años repiten la misma historia en mayor o en menor grado a lo largo y a lo ancho del territorio que tengo entendido que aún es México. Presidentes Municipales, Gobernadores, Regidores, Alcaldes, Diputados Locales, Diputados Federales, Senadores, la lista es larga de tantos y tantos cargos públicos que no nos sirven para nada, este sistema que nos imponen ya no da para más, y sólo zátrapas como éstas insisten en que este es el camino del bien común. Ganarán y harán ganar extraordinarias sumas de dinero que quizá en nuestras vidas no veremos reunidas jamás, llevarán ofensivos estilos de vida en un país que se convulsiona en medio de la tragedia, de la pobreza, y de la desesperanza, pero que gracias a la televisión, al fútbol, y a la desnutrición del cuerpo y del espíritu se mantiene de pie para soportar estos excesos. Nuestro país es un enfermo invadido por parásitos que lo mantienen lo suficientemente vivo para resistir pero no lo suficiente para curarse, le han amputado miembros ( petróleo, comunicaciones, bancos, etc..) con la falsa esperanza de encontrar solución a sus padecimientos, ya no se reconoce, ya ni siquiera sabe quien es, su enfermedad hace mucho le hizo olvidar lo grande y fuerte que era, lo han convencido de que vivir es la miserable existencia que lleva porque ya no hace nada por recuperarse, esta convencido de que su destino es la fatalidad, pero su indeseable huésped parece no darse cuenta de que su desmesura lo llevará a correr el mismo destino de su anfitrión.
visita: http://dineroypoliticacanibal.blogspot.com/
La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece que todo ciudadano mexicano tiene derecho a votar y a ser votado, suena bonito, pero en los hechos este estatuto como muchos otros más ¡es letra muerta!. Resulta una burla que en las boletas electorales se agregue un espacio en blanco donde me den la opción de anotar al candidato o partido político que no aparezca en dicha boleta, pues si decido eligir dicha opción, el voto emitido será anulado. Somos tratados como menores de edad, estamos obligados a elegir las opciones que este sistema nos da nos gusten o no, no hay mas sopa que la que nos sirve nuestra "ciudadanizada" autoridad electoral. Ríos de dinero corren para montar el circense espectáculo que encumbra y acomoda a los de siempre que aunque pretenden distinguirse los unos de los otros con banderas de distintos colores, en los hechos se unifican como una misma manada que persigue el mismo objetivo, la misma causa que no es la misma de las mayorías, una vez montados en sus puestos "de elección popular" sacan la cuchara grande para pagar favores, despacharse a sí mismos y a sus allegados, y todos los años repiten la misma historia en mayor o en menor grado a lo largo y a lo ancho del territorio que tengo entendido que aún es México. Presidentes Municipales, Gobernadores, Regidores, Alcaldes, Diputados Locales, Diputados Federales, Senadores, la lista es larga de tantos y tantos cargos públicos que no nos sirven para nada, este sistema que nos imponen ya no da para más, y sólo zátrapas como éstas insisten en que este es el camino del bien común. Ganarán y harán ganar extraordinarias sumas de dinero que quizá en nuestras vidas no veremos reunidas jamás, llevarán ofensivos estilos de vida en un país que se convulsiona en medio de la tragedia, de la pobreza, y de la desesperanza, pero que gracias a la televisión, al fútbol, y a la desnutrición del cuerpo y del espíritu se mantiene de pie para soportar estos excesos. Nuestro país es un enfermo invadido por parásitos que lo mantienen lo suficientemente vivo para resistir pero no lo suficiente para curarse, le han amputado miembros ( petróleo, comunicaciones, bancos, etc..) con la falsa esperanza de encontrar solución a sus padecimientos, ya no se reconoce, ya ni siquiera sabe quien es, su enfermedad hace mucho le hizo olvidar lo grande y fuerte que era, lo han convencido de que vivir es la miserable existencia que lleva porque ya no hace nada por recuperarse, esta convencido de que su destino es la fatalidad, pero su indeseable huésped parece no darse cuenta de que su desmesura lo llevará a correr el mismo destino de su anfitrión.
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